Del 13 de noviembre al 13 de diciembre, se volverán a establecer los controles en sus fronteras Schengen durante la Cumbre del Clima que tendrá lugar en París. No es excepcional la implantación de esta medida, pero si un período de vigencia tan largo.
París acogerá la 21 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21/CMP11) del 30 de noviembre al 11 de diciembre. Con motivo de esta Cumbre del Clima, Francia restablecerá los controles en sus fronteras Schengen durante un mes, debido al elevado nivel de alerta por la amenaza yihadista.
A lo largo del mes en el que estará vigente esta medida, las fuerzas de seguridad fronterizas podrán controlar sistemáticamente o aleatoriamente los pasaportes de quienes accedan a territorio francés, por lo que el paso fronterizo entre España y Francia se verá afectado, así como otros países europeos limítrofes.
Debido al restablecimiento del control fronterizo, la reimplantación de este tipo de controles implica la obligatoriedad de tener que presentar la documentación a las autoridades galas en las fronteras terrestres cuando ésta sea exigida.
Los países de la zona Schengen tienen permitido restablecer ese tipo de controles de forma excepcional por cumbres de líderes, eventos importantes o problemas inesperados y es una medida que de vez en cuando aplican los países miembros de la UE. De hecho, hace lo hicieron varios del Este y Centroeuropa debido a la oleada migratoria. Sin embargo, esta es la primera ocasión en la que el control se alarga durante un mes.
Un acuerdo que se firmó en 1985
El acuerdo de Schengen, que se firmó en 1985 en la ciudad luxemburguesa del mismo nombre y está en vigor desde 1995, establece un espacio común por el que toda persona que haya entrado regularmente por una frontera exterior o resida en uno de los países que aplican el Convenio puede circular libremente por ese espacio.
En la actualidad forman parte del espacio sin fronteras Schengen todos los de la UE excepto Reino Unido, Irlanda, Bulgaria, Rumanía, Chipre y Croacia, aunque los últimos cuatro son candidatos a la adhesión.
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