Washington ha aprobado controles de seguridad más estrictos para los viajeros que entran en el país procedentes de varios países europeos y asiáticos, entre ellos España, cuyos ciudadanos no necesitan visado para entrar en el país.
Las autoridades de Estados Unidos están preocupadas por las amenazas a la seguridad que suponen la posible radicalización de extranjeros insurgentes en Siria y que posean pasaportes occidentales, puesto que no levantarían sospechas en los aeropuertos y en otros puntos de entrada al país.
El Programa de Exención de Visado de Estados Unidos cuenta con 38 países miembros, entre ellos, España, Reino Unido, Francia, Alemania y otros países europeos, además de Japón, Taiwan, Singapur y Corea del Sur.
Según las autoridades estadounidenses, con fin de reforzar la seguridad de este programa, los ciudadanos de estos países deberán acreditar documentación adicional en un formulario electrónico para obtener permiso de entrada.
Para entrar en Estados Unidos sin visado desde estos países, los viajeros deben obtener permiso a través de un sistema digital denominado Sistema Electrónico para la Autorización de Viaje, o ESTA, por sus siglas en inglés, y pagar una tasa. A partir de ahora, el nuevo formulario incluye además datos adicionales del pasaporte, información de contacto y otros nombres potenciales.
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