Situado en un acantilado frente al océano, el Regina Experimental domina la bahía de Biarritz. Su amplio vestíbulo cobra vida con un interiorismo de Dorothée Meilichzon inspirado en la zona. La arquitectura neovasca y los detalles art déco en su decoración se complementan con elementos japoneses, país estrechamente vinculado al territorio.
Construido en 1907 por el arquitecto y paisajista Henry Martinet, el Regina Hotel & Spa es un establecimiento legendario situado en la costa vasca. El edificio posee una grandiosa estructura de la Belle Époque con un monumental atrio de 15 metros de altura, amplios ventanales, un techo de cristal de Eiffel y abundantes detalles art déco.
El amplio restaurante del hotel y su gran terraza con vistas al océano albergan el Frenchie Biarritz, una creativa brasserie enraizada en la bella cultura culinaria vasca.
Los pasillos que se elevan desde la escalera central envuelven el atrio, donde setenta y dos habitaciones blancas, azules, verde oscuro y rojo vasco dan paso al océano y al emblemático campo de golf de Biarritz, uno de los más prestigiosos de Europa.
Los dormitorios están repletos de detalles de cuerda japonesa, combinada con rayas marinas y frescos de escayola con motivos acuáticos. Evocando la atmósfera de un transatlántico, cada habitación incorpora formas curvas y largas líneas horizontales.
El amplio restaurante del hotel y su gran terraza con vistas al océano albergan el Frenchie Biarritz, una creativa brasserie enraizada en la bella cultura culinaria vasca.
El chef Gregory Marchand se inspira en la cocina local y en la riqueza de los productos vascos. Su menú incluye trucha de Banka, cerdo negro de Gascuña, merluza de San Juan de Luz, cordero lechal, ternera rosada de Axuria, queso vasco de oveja de la granja Aldudes, queso Ossau-Iraty y, por supuesto, pimiento de Espelette. El chef eleva estas delicias locales a través de su cocina generosa, inventiva y mestiza.
Tres amplias cabinas, dos de las cuales son para dos personas, así como un hammam albergan el nuevo spa Susanne Kaufmann & Alaena que combina el poder de las montañas con el del océano. Fabricado en el corazón de los Alpes austriacos, en Bezau, y en Biarritz para Alaena, los protocolos de tratamiento del Spa combinan esencias naturales puras y preciadas y activos de última generación con técnicas de masaje tradicional: movimientos dirigidos y tratamientos antioxidantes para el rostro, exfoliación y envoltura corporal para el Rituel Atlantique, drenaje linfático inspirado en el masaje japonés Kobido…
Bañadores Paramidonna, la colección de bolsos Milaner, la famosa cosmética solar española Kream… la boutique del hotel te ofrece una selección de ropa y accesorios de última generación. Además, el hotel tiene una gran piscina exterior.