Las aerolíneas podrán mantener su política de tarifas actual, pese a la multa de Consumo de 150 millones a cuatro compañías, Ryanair, Vueling, EasyJet y Volotea, hasta que la sanción sea firme, una vez que se resuelva el recurso de alzada que ya preparan y la vía judicial.
La Asociación de Líneas Aéreas (ALA), que agrupa a más de 60 compañías aéreas y un 85 % del tráfico aéreo del país, entiende que la decisión de Consumo va en contra de la normativa europea, concretamente el principio de libertad de fijación de precios reconocido en un reglamento comunitario de 2008 y supone una injerencia en la fijación tarifaria.
Cuando las resoluciones sean firmes, indica la asociación, se verá cuáles son las compañías afectadas y cuál es el posible efecto que puede tener de distorsión de la competencia en cuanto a que unas compañías tengan unas prácticas prohibidas y otras, sin embargo, lo puedan seguir haciendo.
El Ministerio de Consumo impuso a cuatro aerolíneas –Ryanair, Vueling, EasyJet y Volotea– una multa de 150 millones de euros por cobrar a los pasajeros el equipaje de mano, tras las denuncias recibidas por distintas asociaciones de consumidores, ente ellas Facua.
El Ministerio de Consumo abrió en verano de 2023 expedientes a cuatro aerolíneas de bajo coste ante las denuncias recibidas, para investigar prácticas consideradas abusivas. Entre ellas figuraba cobrar un suplemento por la reserva de asientos contiguos para acompañar a menores y personas dependientes; falta de transparencia en la información precontractual sobre el precio final del servicio; cobrar un suplemento por el equipaje de mano de los pasajeros, y no permitir el pago en metálico en el aeropuerto por estos u otros servicios adicionales.
Desde Facua valoran la decisión de Consumo y recuerdan que los consumidores tienen derecho a reclamar la devolución de estos cargos extra, en tanto que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) destaca que, como ha defendido en diversas denuncias, el equipaje de mano debe ser considerado como un elemento “indispensable” del transporte de los pasajeros y, por tanto, no puede ser objeto de un suplemento en el precio del billete de avión.