Gracias a las herramientas de IP tracker, las compañías saben en qué momento los clientes buscan información sobre precios y aplican en consecuencia sus estrategias de yield management.
Según el diario francés Deplacementspros.com, el yield management de las compañías aéreas se aplica cada vez más en función del IP tracker. Es decir, las aerolíneas saben en qué momento sus clientes realizan más consultas sobre las tarifas. Y aumentan sus precios en los momentos de mayor demanda. Concluye que este período corresponde a la franja horaria entre las 10 y las 12 de la mañana de los días laborables.
La estrategia consiste en detectar una primera búsqueda, con un precio ofertado. Cuando el usuario accede por segunda vez, ya sea para comprar o para consultar de nuevo, el precio habrá variado, siempre con un encarecimiento no muy importante pero lo suficiente para incentivar la compra ante el temor a que la tarifa siga subiendo.
Sobre el ejemplo de un trayecto París-Pekín, tras consultar las tarifas en ocho momentos diferentes del día, la diferencia entre el precio mínimo y máximo llegó a ser de 106 euros.
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