Latam Airlines aborda el ejercicio 2023 con gran optimismo. Después de salir de la ley de quiebras en EEUU, a la que se acogió en 2020, cuenta con nuevos fondos propietarios que han supuesto su despegue financiero y una reestructuración completa. Además de reforzar la capacidad en España, mantiene su apuesta por el viajero de negocios.
La aerolínea aumentará a ocho frecuencias semanales a partir de abril en la ruta Madrid-Santiago de Chile y llegará a diez a finales de verano. En Barcelona solo falta la ruta con Lima y el plan es cambiar del Boeing-787 al Boeing-777, configurado con 400 asientos y con la nueva cabina Business. En total son 21 frecuencias desde Sudamérica con Madrid y 4 con Barcelona.
Latam también cuenta con dos aviones más, que están sufriendo algún retraso, para continuar con su plan de expansión en Europa, para lo que se apoya también en el acuerdo de códigos compartidos con Iberia.
En términos generales, la recuperación está siendo buena, tanto en el tráfico vacacional como en el corporativo. Además, la compañía ha realizado un encargo de 80 unidades del A320 que recibirá en 2030.
Según Thibaud Morand, director de Latam Airlines para Europa, “hemos recuperado el 85% de los viajeros de negocios en comparación con las cifras de 2019. Es un dato muy positivo. No hemos tenido que quitar butacas Business porque las cabinas van llenas. La respuesta está siendo mejor entre las pequeñas y medianas empresas que entre las grandes corporaciones, que van más lentas”.
Sobre la reestructuración de la compañía tras la salida del Chapter 11, la ley de quiebras norteamericana, Andreas Scheck, VP de Ventas y Marketing, destaca “la importante reducción de costes que hemos abordado, con una reducción de la deuda del 30%. Esto nos hace ser más competitivos, porque somos una empresas más liviana, más ágil y con más liquidez”.
Al margen de la recuperación en Europa, que está en curso en los países donde opera (España, Italia, Francia, Portugal, Reino Unido y Alemania), Latam Airlines cuenta actualmente con más capacidad que antes de la pandemia en mercados como Brasil o Colombia. La aerolínea ha realizado grandes inversiones para abrir nuevas rutas y mejorar el servicio a bordo.
La estrategia de sostenibilidad es otro de los puntales de la compañía para esta nueva etapa. Como explica Marty St. George, Chief Communications Officer de Latam Airlines, “nuestro compromiso es llegar al 5% de uso de combustible SAF en 2030. Es un reto importante, porque en Latinoamérica no existe hoy por hoy ninguna planta de producción”.
A corto plazo, la compañía optará por la compensación de emisiones. Uno de sus proyectos estrella se encuentra en Colombia, junto al Orinoco, donde el objetivo es proteger 200.000 hectáreas en las que 200 familias viven del cultivo y la ganadería.
