
Según Bouba Barrow, responsable de la marca Exe Hotels, el mayor reto del sector es subir unas tarifas que no solo no aumentan, contradiciendo las previsiones, sino que descienden, a pesar del crecimiento de la demanda.
Bouba Barrow es responsable de desarrollo de marcas de Prestige Hotels, que engloba la insignia Exe Hotels, con 17 establecimientos en España. A su juicio el mayor reto de los hoteleros españoles «es incrementar los precios, algo muy difícil en una coyuntura de crisis. El travel manager ya se ha acostumbrado a unos niveles de precios que hacen aún mas difícil el retorno a la rentabilidad de 2008».
Y es que, a pesar de que la tendencia apunta a un aumento de las tarifas por noche, en noviembre se registró de nuevo una bajada media del 0,3% a nivel nacional mientras que las pernoctaciones aumentaron un 7,2%. El precio medio de una habitación en España es de 68,6 euros.
Según el responsable de branding de Exe Hotels, en los últimos años hemos pasado de una contratación fija a otra variable y posteriormente, a aplicar descuentos sobre esas condiciones variables. «Yo creo que lo que hay que hacer es dar mayor valor, compromisos y servicio como argumento de fidelización», apunta Barrow.
En cuanto a los destinos business estrella para este año, Barrow señala que seguirán prevaleciendo los que tienen mayor penetración en este segmento: los nacionales como Barcelona y Madrid; los europeos, como Milán, Londres, París o Frankfurt; y en larga distancia Nueva York, Singapur, Sao Paulo, entre otros. «Veremos además destinos que seguirán floreciendo. Tánger, Argel o Luanda son algunos ejemplos», vaticina.