
Málaga y la Costa del Sol siguen en primera línea como destinos de referencia en el territorio nacional para la actividad mice. El éxito se debe a una planta hotelera de gran calidad, en permanente renovación; espacios singulares de enorme atractivo, y un entorno marcado por el buen clima y las actividades de incentivo en plena naturaleza, sin olvidar una gastronomía rica y variada. En esencia, atesoran un cúmulo de factores que aportan una indudable sensación de calidad de vida difícil de igualar.
La verdad es que poco se puede objetar a Málaga y a la Costa del Sol en lo que respecta a infraestructuras para reuniones y eventos, empezando por los palacios de congresos. La capital, con el FYCMA y sus 60.000 m 2 ; Torremolinos, con 3 auditorios y 14 salas ; Marbella, con más de 10.000 m2 de espacios ; Ronda, en un antiguo convento con magníficas vistas ; o Estepona, con 21.000 m2 y una amplia zona ajardinada para convocatorias al aire libre, cuentan con este tipo de instalaciones.
Pero eso no es todo, ni mucho menos. La Costa del Sol alberga más de 140 hoteles con espacios para eventos que superan de forma conjunta las 550 salas y una capacidad para cerca de 70.000 personas. Desde luego, oportunidades para elegir y ajustar al máximo la propuesta a las necesidades particulares no faltan.
Es tal la diversidad que nunca viene mal recurrir al Convention Bureau de la Costa del Sol, en activo desde 1993 y miembro de la International Congress and Convention Association (ICCA). El organismo cuenta con una dilatada experiencia, por lo que es una herramienta muy aconsejable para informarse sobre las posibilidades de organización de cualquier tipo de evento. Sus profesionales cuidan hasta el último detalle, con un servicio que se apoya en empresas auxiliares de primer nivel.
Al elegir un destino para un programa MICE, la oferta de ocio también resulta determinante. En este sentido, la Costa del Sol hace gala de una extensa red de espacios singulares, desde plazas de toros, fincas rústicas o jardines botánicos hasta museos, hoteles con encanto, antiguos palacetes, casas señoriales o teatros. Desde luego, cualquier idea es factible en la región.
Tampoco hay que olvidar, pensando en la gestión de grupos internacionales, las excelentes conexiones que facilitan tanto el aeropuerto, entre los cinco más activos de España ; el AVE, que enlaza con Madrid en apenas dos hora y media ; y el puerto, que junto con el de Barcelona es el campeón de los cruceros en nuestro país.
NOVEDADES
En un destino tan dinámico, las novedades están a la orden del día. Como es difícil reseñarlas todas, lo más justo quizá es hacer referencia a las últimas y solo a modo de ejemplo. Es el caso del nuevo Higuerón Hotel Málaga Curio Collection by Hilton, que recientemente ha añadido una estrella más a las cuatro que ya poseía y ha ampliado el número de habitaciones y las salas para eventos.
El exclusivo establecimiento, adscrito al segmento only adults, se encuentra en la localidad de Fuengirola, a solamente 15 minutos del aeropuerto, y es, entre otras cosas, todo un paraíso para los golfistas, ya que en sus inmediaciones se extienden nada menos que 11 campos de 18 hoyos. El complejo se completa con un excelente club deportivo, parte de cuyas instalaciones también están disponibles para los huéspedes. Tampoco hay que olvidarse del restaurante Sollo, con una estrella Michelin.
En las afueras de Málaga capital, al norte de Ciudad Jardín, en un entorno natural envidiable, otra gran novedad para el sector MICE es la apertura de los Jardines de San Telmo, un espacio gestionado por Alabardero Catering que, por supuesto, ha adoptado todas las medidas de prevención necesarias contra el coronavirus.
Con más de 8.000 m2 repartidos en dos niveles de plataformas voladizas, este proyecto, inspirado en la famosa Casa de la Cascada de Frank Lloyd Wright, cuenta con una amplia zona para cócteles y espacios para cenas al aire libre de hasta 300 personas, junto a una espectacular fuente que representa la continuación del acueducto de San Telmo, un resto arqueológico que se encuentra en la misma finca.
También dispone de un cenador acristalado en medio del jardín para unos 250 comensales y la zona del antiguo lagar con unas originales gradas exteriores. El lugar dispone de zona de aparcamiento para unas 70 plazas y acceso preparado para autobuses.
EXPERIENCIAS
En un destino bañado por la costa mediterránea no podían faltan actividades enmarcadas en un escenario tan atractivo. Son las que proponen, entre otros, Shonia y Pedro, una pareja de pescadores que, a través de la empresa Turismo Marinero, han apostado por una alternativa complementaria y sostenible a su profesión que, por otra parte, les apasiona. Con ellos se puede descubrir el auténtico mundo de la pesca artesanal y realizar visitas guiadas, rutas gastronómicas, excursiones al mar o talleres educativos. Solo hay que elegir puerto: Marbella, Estepona, Fuengirola o Caleta de Vélez…
Pero las posibilidades de team building no acaban ahí. Exploramás es un operador con sede en Málaga y ramificaciones en Sevilla y Barcelona que diseña todo tipo de actividades para grupos corporativos. Sus fundadores nacieron de la aventura, un matiz que imprimen a sus propuestas, con tres objetivos muy claros: divertir, sorprender y emocionar. Aquí caben desde karaokes en el mar hasta batallas flamencas o intervenciones reales de street art. Además, en su variado catálogo están muy presentes los conceptos de sostenibilidad y responsabilidad social corporativa.
CAMINITO DEL REY
Desde hace pocos años, una de las experiencias más extraordinarias que se pueden disfrutar en la Costa del Sol es el Caminito de Rey, el vertiginoso paso recuperado en las paredes del desfiladero de los Gaitanes, en el centro de la provincia, no lejos de Antequera. El estrecho sendero sobre el antiguo camino de servicio entre los ingenios hidráulicos está reconstruido en madera y aluminio a 700 metros de altura en sus partes más elevadas, siguiendo el curso del río Guadalhorce, y es de los que quitan el hipo. Literalmente.
Ya antes de la pandemia de la covid-19, y debido al enorme interés suscitado desde su rehabilitación, el recorrido, de unas tres o cuatro horas de duración, solo se puede realizar en sentido descendente, de norte a sur. Es una manera de facilitar el tránsito y los cruces incómodos. Lo cierto es que resulta inevitable pararse casi en cada curva para admirar la rotundidad del paisaje desde las alturas, venciendo la misma sensación sobrecogedora que debió experimentar el rey Alfonso XIII cuando inauguró el trazado originario.
Por cierto , hasta la llegada del AVE el desfiladero era el único acceso ferroviario a Málaga capital desde el interior de Andalucía. A partir de los años veinte, tras la construcción de la presa del Chorro, más tarde denominada del Conde de Guadalhorce, parte de los trabajadores que habían participado en su construcción se instalaron definitivamente allí.
Para todos ellos fue vital la existencia del Caminito del Rey, que permitía a los niños asistir a la escuela tras un trayecto relativamente corto, a las mujeres avituallarse de los productos de primera necesidad y a todos los habitantes en general mantener un contacto directo con otras poblaciones.
Historia y exuberante naturaleza se dan cita, pues, en un lugar que se ha convertido en una atracción turística de primera magnitud y que da pie también a realizar otras excursiones por los alrededores o disfrutar de las actividades acuáticas en los embalses, sin olvidar la reposición de fuerzas en restaurantes como El Mirador Ardales —con fantásticas vistas, haciendo honor a su nombre— o el situado en el complejo rural La Garganta.
En la web www.caminitodelrey.info está todo maravillosamente explicado, con detalles sobre el recorrido, la logística y la oferta de los alrededores a través de vídeos, mapas, imágenes y hasta un recorrido virtual de 360 grados. El nuevo Centro de Recepción de Visitantes, prácticamente terminado, está a punto de abrir sus puertas, un buen preludio para el espectáculo que espera al visitante. •
MÁS INFO
www.visitacostadelsol.com