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VALENCIA. Coqueta y luminosa

TEXTO M. LOZANO
FOTOS M. L. / VALENCIA C.B.

Ciudad de las Ciencias y las Artes
Ciudad de las Ciencias y las Artes

‘Todo es luz’ es el título de la última canción del grupo Seguridad Social, que rinde homenaje a uno de los iconos valencianos: Joaquín Sorolla. Y también a la forma de ser de Valencia, la terreta donde el Mediterráneo se funde con el cielo y crea las formas de una ciudad que mira siempre con ilusión a un futuro más sostenible, sin dejar de lado su esencia de siempre. Valencia es la ciudad que nunca defrauda y siempre sorprende, también a la hora de acoger reuniones y eventos.

 

Si Blasco Ibáñez o Manuel Vicent volvieran a trazar con sus palabras el perfil actual de Valencia, probablemente cambiarían el devenir de algunas de sus mejores novelas. La capital valenciana lleva años vistiéndose de una innovación bien anclada a sus raíces, lo que le ha permitido mantener la esencia de ciudad mediterránea que mira al futuro de cara. Unos nuevos aires que pasan por una decidida apuesta por la sostenibilidad desde una perspectiva de 360 grados.

Este planteamiento conforma una ciudad más ecológica —el 90% de los valencianos vive a menos de 300 metros de una zona verde— y con un cuidado especial por salvaguardar lo de casa, como el producto de proximidad y las tradiciones. Un mérito que le ha valido el reconocimiento de la Comisión Europea para convertirse el próximo año en Capital Verde Europea, y entrar en el selecto club en el que ya están Vitoria, Estocolmo, Hamburgo, Copenhague o Tallin.

En esta transformación ha tenido mucho que ver el eje que forman el Jardín del Turia, uno de los parques más grandes de Europa, y la Ciudad de las Artes y de las Ciencias, el complejo de ocio y cultura diseñado por el valenciano Calatrava que metió a Valencia de lleno en el siglo XXI. Sin duda este recinto, en el que los límites los marca la imaginación, está en el top of mind de muchas marcas para sus campañas publicitarias y de los que quieran organizar algo en la ciudad.

De hecho, ha sido la sede de los últimos grandes eventos que han escogido Valencia como sede, entre ellos la gran fiesta del cine de los premios Goya o la entrega de las estrellas Michelin de España y Portugal en 2022. Este mismo año también acogió la gala en la que se dieron a conocer los 50 mejores restaurantes del mundo. Estas convocatorias han puesto una vez más a la capital del Turia en el punto de mira internacional, sobre todo por recintos tan emblemáticos como el Palau de les Arts, el singular casco de gladiador romano que acoge la programación lírica y sinfónica valenciana y que ofrece una gran versatilidad para privatizar espacios.

Con sus 4.000 m2 y los más de 300 días de sol al año, la terraza de L’Umbracle se convierte en el contexto ideal para presentaciones de producto, cenas de gala o simplemente eventos que requieran brillar con luz propia. El acuario más grande de Europa, el Oceanogràfic, permite que los asistentes a un evento descubran la fauna submarina de los océanos en una visita privada. O pasar de una ponencia con una recreación del Mar Rojo de fondo a un cóctel entre rayas y tiburones.

Al fin y al cabo, la Ciudad de las Artes y las Ciencias es un poema de amor entre agua y arquitectura, como se puede apreciar desde cualquier perspectiva del recinto. También es muy relevante en el Hemisfèric, la sala de cine más grande de España, así como el Caixa Fórum Valencia, ubicado en el edificio Ágora y concebido como una puerta a la cultura en el que se pueden aprovechar tanto los espacios expositivos como otros exclusivos para reuniones.

El protagonismo de la luz

Lo que no ha cambiado en Valencia desde tiempos inmemoriales es la luz. Artistas de todos los tiempos la han plasmado de diferentes formas. Al pintor valenciano más internacional, Joaquín Sorolla, se le reconoce precisamente por haberla sabido atrapar en sus cuadros de escenas cotidianas en la playa. Este año, en Valencia lo están dando todo para conmemorar el centenario de la muerte del pintor.

Merece la pena comérselo en los 14 pasos del menú que ha elaborado el chef Jorge de Andrés en el restaurante Vertical tras inspirarse en la colección que hizo Sorolla para la Hispanic Society de Nueva York. O empaparse de sus obras en las muchas muestras y exposiciones que se están llevando a cabo en la ciudad, como la de carácter inmersivo ‘Sorolla, una nueva dimensión’, en la Marina.

No muy lejos está uno de los espacios más emblemáticos para la organización de eventos, el edificio Veles e Vents, cuyo nombre rinde homenaje a un poema del valenciano Ausiàs March. Diseñado por los arquitectos David Chipperfield y Fermín Vázquez, nació con el objetivo de albergar a los invitados y espectadores de la 32ª America’s Cup. Su interior, con vistas al Mediterráneo, es tan polivalente como la ocasión lo requiera, aunque quizá lo más atractivo de sus 5.000 m2 sea la terraza, donde se pueden organizar cócteles, presentaciones, cenas o almuerzos con la suave brisa y los colores del mar como acompañantes.

Otro reconocido arquitecto, en este caso sir Norman Foster, fue el responsable del diseño del Palacio de la Luz —sí, de nuevo, la luz como estrella invitada— o, lo que es lo mismo, el Palacio de Congresos de Valencia. Con tres auditorios —uno de ellos con capacidad para más de 1.400 personas— varias salas multiusos y una amplia zona de exposición acristalada rodeada de jardines, es el espacio idóneo para plantearse organizar todo tipo de reuniones y eventos.

En el Paseo Alameda, el Palau de la Música es otro de los recintos más representativos de Valencia para cualquier acto, especialmente aquellos que requieran una acústica excepcional. Completa el trío de ases ‘palaciegos’ el Palau Alameda. De estilo mucho más contemporáneo, es uno de los place to be de los tardeos y las noches valencianas, y sus 2.700 m2 se adaptan a cualquier circunstancia.

Si hay un espacio donde tienen experiencia en organizar eventos es en la Feria de Valencia. Con sus más de cien años, es el recinto expositivo más antiguo de España. También, con nada menos que 230.000 m2, el más grande. Ferias, convenciones, congresos, reuniones… todo tiene cabida en este complejo que ofrece un aforo de 20.000 personas: 19 pabellones, 48 salas multiusos y 3 auditorios, entre otros espacios, además de una amplísima plaza ajardinada que, gracias al buen clima, se puede disfrutar prácticamente durante todo el año.

Mirando al futuro

Como la luz, Valencia se transforma un poco cada día. Y se recuperan continuamente espacios para darles una nueva vida. Es el caso de Bombas Gens, que forma parte de su legado industrial. Una antigua fábrica de bombas hidráulicas reconvertida en uno de los recintos culturales más singulares de la ciudad, que cuenta en sus instalaciones con una bodega subterránea del siglo XV y un refugio anti aéreo de la Guerra Civil.

También cuenta con varias salas para conferencias, exposiciones y muestras en dependencias que conservan en cierta manera el carácter industrial con el que fueron ideados, pero que destacan por la gran versatilidad que facilitan los espacios diáfanos. Y con el aliciente de compartir recinto con el restaurante del chef valenciano Ricard Camarena, lo que añade la posibilidad de servir un catering con dos estrellas Michelin.

Algo parecida, aunque de dimensiones más reducidas, es La Agencia Place, una antigua nave industrial de los años cincuenta del siglo pasado, en pleno centro, que hoy se ha reconvertido en un llamativo espacio para eventos con apariencia de loft neoyorquino. No está lejos del centro neurálgico de Valencia, la plaza del Ayuntamiento, que tiene en uno de sus costados a la institución que desde 1879 es el referente para la vida cultural, comercial y de ocio de los valencianos: el Ateneo Mercantil. Con más de 15 espacios para eventos y reuniones, acaba de estrenar la terraza Athenea Sky, un rooftop con unas muy apetecibles vistas mientras se saborea un buen agua de Valencia, el cóctel local por excelencia.

En la ciudad no dejan de surgir nuevas ideas y conceptos. Uno que está de rabiosa actualidad es el de los mercados gastronómicos. Hace unos meses abrió, en una de las zonas más trendy, entre Ruzafa y el Ensanche, el Mercado de la Imprenta. Como su propio nombre indica, era una antigua fábrica de artes gráficas que hoy en día forma parte del panorama gastro de los valencianos y donde se pueden organizar eventos muy pintones. Y atención a las agendas. A finales de 2024 está prevista la inauguración del Roig Arena que, además de convertirse en el nuevo coliseo del equipo de baloncesto de la capital valenciana, está llamado a convertirse en un recinto multiusos, incluidos los eventos corporativos.

De vuelta al presente, o más bien, a lo de siempre, la apuesta de Valencia por hacer una ciudad más amable le ha llevado a desarrollar más de 150 kilómetros de carril bici para poder llegar pedaleando a cualquier sitio, hasta la misma playa. También hasta una de las mejores despensas del mundo: la huerta, responsable en gran medida de la calidad de la gastronomía valenciana, además de los arrozales y, por supuesto, el mar. Un exquisito conjunto que da garantía de productos frescos. Así los mercados y restaurantes de la ciudad pueden presumir de productos de kilómetro cero, todo un modelo de sostenibilidad alimentaria.

Una de las experiencias más auténticas es descubrir el proceso de cómo se elabora la horchata desde el principio, en una ruta guiada por un campo de chufa y terminar con una degustación en el museo dedicado a la bebida más fresca de Valencia, el Museo de la Horchata, en la Alquería El Magistre. Otra forma de disfrutar de la huerta es organizar una jornada en alguna de las masías que todavía se conservan.

En Villa Indiano se ha recuperado una antigua residencia señorial de comienzos del siglo XX, ubicada en plena huerta de Burjasot, donde la gastronomía va de la mano de la cultura, con una interesante programación en su jardín durante todo el año. El restaurante Alma del Temple pone el sabor a los eventos que se organicen en este singular venue, con una capacidad total para 400 personas que, por monumentalidad y ubicación, tienen el aura de exclusividad asegurada.

RECOMENDADOS

LA ALBUFERA, RECONEXIÓN CON LA ESENCIA

Hay quien dice que ver el atardecer en la Albufera de Valencia es una de las cosas que hay que hacer en la vida. A un paso de la capital, caer en el tópico de calificar como oasis a este parque natural, rodeado de marjales y arrozales, es muy fácil, pero también se queda muy corto. El entorno del humedal es todo un reclamo para los enamorados de la naturaleza en estado puro en todos sus ciclos, donde recorrer dunas, pinos y la arena de unas playas casi salvajes. O para los que quieran sumergirse en el entorno de Cañas y Barros, descubriendo las tradiciones valencianas en una típica barraca. Y con la posibilidad de organizar jornadas de teambuilding o eventos en la barraca de Aranda o la de Fang i Pallús, del Club Alcatí, en el poblado de El Palmar. Aquí, según la tradición, está el origen de la paella genuina, por lo que es un auténtico lugar de peregrinación para los foodies que huyen del ‘arroz con cosas’ y buscan el sabor de las recetas con historia, como el también típico guiso de anguilas y patatas, el tradicional all-i-pebre.

EL CABAÑAL, A OTRO RITMO

Puede parecer mentira que en la ciudad que alberga la arquitectura innovadora de la Ciudad de las Artes y de las Ciencias se puedan seguir encontrando retazos de lo que fue y en parte sigue siendo. Valencia es un claro ejemplo de cómo salvaguardar ese encanto inconfundible de lo auténtico. Las casitas de pescadores y las de azulejos se intercalan con estructuras modernistas en el laberinto del barrio de Cabañal, entre locales que entran obligatoriamente en las referencias de cualquier guía gastronómica de Valencia. Mercader ha sido una de las últimas aperturas, un espacio con puestos de comida ubicado en lo que fuera una antigua tonelería. También son legendarios los arroces de Casa Carmela o las tapas de Casa Montaña, así como los enormes bocatas de La Pascuala y La Paca.

ONLY YOU HOTEL VALENCIA *****

Un cinco estrellas a dos pasos de la plaza del Ayuntamiento y de Poeta Querol, la calle que durante años ha sido considerada la ‘milla de oro’ de Valencia. Es decir, en pleno centro. El hotel ofrece habitaciones con mucho diseño y pensadas al mínimo detalle, de las que no dan ganas de salir. También una propuesta gastronómica que va desde un desayuno con impresionantes vistas hasta el lado más salvaje de la cocina japonesa en SLVJ.
Plaza de Rodrigo Botet, 5
Tel. 963 98 10 00
https://www.onlyyouhotels.com

LAS ARENAS BALNEARIO RESORT ***** GL

La excepcional ubicación en la playa de Las Arenas, la comodidad de las habitaciones y, por supuesto, los servicios del spa consiguen hacer desconectar de la rutina y sentirse como los privilegiados que en el siglo XIX iban a tomar las aguas al antiguo balneario. La joya de la corona de la cadena Santos.
Eugenia Viñes, 22-24
Tel. 963 120 600
www.hotelvalencialasarenas.com

HOSPES PALAU DE LA MAR *****

Un palacete del siglo XIX de pasado marinero alberga este excepcional establecimiento, muy cerca del centro histórico y en una de las calles más bonitas de Valencia. Ofrece habitaciones donde el etilo, el diseño y el arte van muy de la mano.
Avenida de Navarro Reverter, 14
Tel. 963 162 884
www.hospes.com/es/palau-mar/

MELIÁ VALENCIA ****

Las buenas vistas están aseguradas desde el edificio más alto de Valencia que ocupa este hotel, enfrente del Palacio de Congresos y con muy buena comunicación, tanto a la estación Joaquín Sorolla, el centro de la ciudad y la playa. Por si fuera poco, dispone de un centro de convenciones con 23 salas de reuniones y una capacidad total de 2.000 personas.
Avenida Cortes Valencianas, 52
Tel. 963 030 000
www.melia.com

VINCCI ****

La cadena cuenta con tres hoteles en Valencia, todos de 4 estrellas. El Vincci Lys, elegante y acogedor, se ubica en pleno centro, en una tranquila calle peatonal. El Vincci Palace, también excelentemente situado, en pleno casco histórico, ocupa un edificio histórico rehabilitado con un toque moderno. Por su parte, Vincci Mercat, a 100 metros del Mercado Central, es otra opción muy interesante para disfrutar de la ciudad.
www.vinccihoteles.com

EL POBLET

Dos estrellas Michelin y la batuta inicial de Quique Dacosta. Con esas credenciales poco más hay que añadir. Solo deleitarse con el menú elaborado por esta institución gastronómica en pleno centro de Valencia. Las propuestas de Luis Valls, que desde 2014 está al mando de los fogones, van desde la denominada cocina de territorio a la vanguardia culinaria.
Correos, 8
Tel. 961 111 106
elpobletrestaurante.com

CONTRAPUNTO

Con una ubicación excepcional, en el Palau de Les Arts, se ha convertido en una de las referencias para los valencianos, con una deliciosa fusión entre los clásicos y la nueva cocina de mercado. Con zona chill out y la perspectiva de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, poco más se puede pedir.
Avda. Professor López Piñero, 1
Tel. 675 365 474
www.restaurantecontrapuntolesarts.com

LA SALITA

En una antigua casa burguesa del s. XIX en el barrio de Ruzafa, la chef Begoña Rodrigo ofrece un menú sin estridencias en el que las verduras son protagonistas, así como el mar y las hortalizas. Los fines de semana se da paso a L´Hort al Nú (el huerto al desnudo, en valenciano) con una experiencia gastro que se bebe en cóctel y con el saber hacer de Denys Cherkasov, reconocido como el mejor barman de la Comunidad Valenciana en 2019.
Pere III el Gran, 11
Tel. 609 330 760
www.anarkiagroup.com

LA BARRACA DE TONI MONTOLIU

Si hay que tomarse una paella en Valencia, que sea en una barraca, entre naranjos, en la huerta. En la de Toni Montoliu se sirven las de toda vida, hechas sin prisas a la lumbre de la leña de naranjo, para sentirse como en casa. Una auténtica inmersión en la cultura tradicional que se puede completar con un paseo por el campo y una visita al corral.
Partida de l’Ermita. Meliana
Tel. 603 73 37 14
www.barracatonimontoliu.com