El Patronato de la Alhambra acaba de implementar, de forma transitoria, un nuevo sistema que exige entradas nominativas a los grupos que acceden al monumento. De esta forma, se pretende terminar con la reventa y aumentar la seguridad.
Polémica a la vista. El Patronato de la Alhambra estrenaba ayer, 1 de mayo, un nuevo sistema de acceso al monumento más visitado de España mediante el cual, las entradas de los grupos han de ser nominativas. Este nuevo modelo convivirá de momento con el anterior, porque hay pases que se compraron con antelación y no están adaptados a las nuevas exigencias.
Con el nuevo sistema de venta de entradas puesto en marcha el pasado 1 de octubre, la medida ya se estaba aplicando para el turista individual, cuya entrada cuenta con un código QR y están vinculadas a su DNI o pasaporte. Tras varias reuniones con diversos agentes del sector, ahora la Alhambra ha decidido dar “un paso más” y extenderlo a los grupos organizados.
Con la aplicación de este sistema también para los grupos, las críticas no se han hecho esperar. La Asociación Provincial de Empresas de Mediación Turística de Granada ha rechazado la implantación de los pases nominativos al considerar que el nuevo modelo dificulta las gestiones para las entradas de grupos a la Alhambra y provocará que agencias y operadores dejen de tener Granada como destino.
Por su parte, la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), que hace unos días advirtió de que la Alhambra será el primer monumento en exigirles el nombre, documento de identidad, sexo y edad de cada uno de los integrantes de sus grupos o clientes particulares a la hora de reservar la entrada.
[useful_banner_manager banners=1 count=1]